
La Carrera de Comunicación de la Universidad Técnica del Norte impulsa nuevamente su proyecto “Educomunicación como estrategia de transformación inclusiva, social y productiva: proyecto de intervención en comunicación para el desarrollo en Imbabura”. Iniciativa que, desde hace cinco años, promueve el desarrollo comunitario mediante productos educomunicativos. Desde abril de 2025, cinco estudiantes de sexto nivel de la carrera colaboran con personas privadas de libertad (PPL) de la cárcel regional de Ibarra en la producción de contenidos para la radio La Paradoja, programa gestionado por internos durante más de 18 años y transmitido semanalmente por la emisora municipal de la Alcaldía de Ibarra.
Coordinado por la PhD. Ana María Larrea, responsable del área de vinculación, el proyecto integra la creación de guiones, procesos de preproducción, grabación y edición radial, así como capacitaciones en fotografía, expresión oral y diseño editorial. Además, se apoyará la producción de una revista local con escritos y arte creados por los PPL, complementando las publicaciones nacionales existentes. La iniciativa cuenta con la apertura de los directivos, con el respaldo por parte del Tnte. SP Vicente Romer Miño Andrade, director del Centro de Privación de Libertad (CPL) de Imbabura N°1 y la colaboración del Lcdo. Luis Esteves, encargado del área de educación del centro carcelario.
Actualmente, el grupo de estudiantes se encuentra en la fase de diagnóstico para evaluar el conocimiento ciudadano sobre La Paradoja y definir estrategias de promoción. Los estudiantes, seleccionados por su madurez emocional y habilidades en producción radial, visitan la cárcel cada viernes bajo supervisión permanente, garantizando un acompañamiento integral hasta la finalización del proyecto en julio.
La coordinadora del área de vinculación de Comunicación PhD. Ana María Larrea destacó el impacto bidireccional de la experiencia: mientras los universitarios adquieren competencias técnicas y rompen estereotipos sobre los PPL, los internos fortalecen sus habilidades comunicativas y organizativas. “Es un intercambio que promueve inclusión social y laboral”, afirmó. La meta es consolidar este proyecto como un modelo replicable, con planes de continuidad hasta 2026 mediante nuevos equipos estudiantiles.
Esta iniciativa refuerza el compromiso institucional con la responsabilidad social, demostrando cómo la comunicación puede ser un puente para la transformación colectiva.